La Diputación Alavesa ha entregado en la tarde de ayer, en Alegría, los premios Nekazaraba. Se concederán cada dos años para reconocer la labor de hombres y mujeres del campo alavés.
Se premia asimismo la contribución de estas personas al desarrollo del territorio. El sector primario alimenta al mundo. Sin él no somos nada, ha dicho la premiada Leire Belaustegi, una joven vitoriana que ha hecho el camino inverso al habitual, de la ciudad al campo. Hoy lleva las riendas de la Pastelería Goiuri de Izarra y gestiona, con la familia, una explotación de vascas limousinas en Gujuli.
Belaustegi recuerda que al principio fue reticente porque suponía un cambio total de vida. Y añade que después empezaron poco a poco con el tema de las vacas y para ella ha sido un descubrimiento total. La solidaridad vecinal, el trabajo cooperativo, la familia… han sido los valores más comentados ayer en Dulantzi. Hernando Sasigain, agricultor de Arbulo, ha dedicado el premio a su madre. Sasigain ha agradecido a su madre que, en el día en que su padre falleció, se hiciera cargo de la explotación con la ayuda del agricultor. Este trabajador ha comentado que quien merece realmente este premio es su madre.
Los premios Nekazaraba 2019 han reconocido también el trabajo del productor de leche de Ollerías, Miguel Ortiz de Zárate; de la sociedad cooperativa GARLAN, de Ilarraza y de la Asociación de Mujeres Agrarias, Gure Soroa.